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Se trata de sentirte cómodo en tu propia piel

Motivado por el amor por su madre, este emprendedor creó una línea para el cuidado de la piel cuyos ingredientes son la confianza y la transparencia.

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    Brendan Aker sabe lo que es sentirse incómodo en su propia piel. Como un hombre gay que creció en una familia católica, que sufrió de rosácea desde una edad temprana y que emprendió una carrera en el campo de las finanzas dominado por hombres heterosexuales, dudó de sí mismo durante la mayor parte de su vida.

    Cancelar citas, quedarse sentado durante un baile o rechazar eventos sociales por culpa de brotes en la piel o su propia cohibición eran situaciones comunes. Aprendió a vivir con ello. Pero cuando su madre recibió un diagnóstico de cáncer y tuvo problemas graves en la piel debido al tratamiento que la dejó sintiéndose no como si misma, no pudo quedarse parado sin hacer nada. Como si fuera cosa del destino, no fue hasta que ayudó a su madre que terminó ayudándose a sí mismo y a muchos otros que han sufrido en silencio durante años.

    Aker no tenía una formación científica ni mucho capital, así que aprovechó 3 cosas que tenía en abundancia: su pasión por la investigación, una increíble red de conexiones y un impulso incesante de ayudar a su madre.

    "A menos que tengas mucha suerte o mucho dinero, debes amar lo que estás haciendo para que algo tenga éxito."

    Brendan Aker, fundador de pHix

     

    Chase for Business

     

    Manos a la obra

    Comenzó por profundizar en los productos para el cuidado de la piel que ya están en el mercado y rápidamente se dio cuenta de algo: la mayoría tenía un precio excesivo, todas las afirmaciones prometedoras eran audaces con poco o ningún respaldo, y a menos que estuvieras bien informado sobre los ingredientes y sus interacciones, básicamente tenías que probarlos y esperar lo mejor. Así que tomó todo lo que había aprendido, así como las conexiones que había hecho con profesionales en la industria del cuidado de la piel, y desarrolló su propia línea de productos y una plataforma para educar a los consumidores para que se sintieran más seguros en su experiencia.

    "Sentí que estaba pagando un alquiler cuando debería haber estado pagando una hipoteca porque estaba gastándome el dinero en los productos de los demás, y resultó que muchos tenían ingredientes cuestionables", dice Aker. "No entendía cómo estas grandes compañías podían hacer eso, cuando, incluso al principio de mi investigación sobre el cuidado de la piel, pude ver que había problemas. Así que quería hacer un cambio y ‘arreglar’ la industria predatoria".

     

    Aumentar el pH y la confianza

    Dos años más tarde, Aker ahora vende una línea de productos para el cuidado de la piel inclusivos y 100% orgánicos, llamada "pHix", pronunciada "fix" y escrita de esa manera por su alto contenido de pH. Y descubrió que sus productos ayudaron a su madre y a muchos otros, incluyendo a Aker, a volver a disfrutar de sus vidas.

    "Eso es todo lo que quiero hacer por las personas, para ayudarlos a sentirse bien y no de una manera superficial", dice. "Pero la piel es algo que usas todos los días y creo que a las personas les resulta más fácil expresarse y hacer cosas buenas cuando se sienten bien consigo mismas".

    "Te pones la piel todos los días y creo que a las personas les resulta más fácil expresarse y hacer cosas buenas cuando se sienten bien consigo mismas."

     

    No fue fácil para Aker salir de su zona de confort, pero tener que superar los obstáculos durante toda su vida lo ha fortalecido. "Toda mi vida he estado tan cohibido que tenía miedo de hacer cualquier cosa por mi cuenta", dice. "Al principio, le daba demasiadas vueltas a todo y me costaba mucho hacer presentaciones o incluso hablar con los dermatólogos. Pero me di cuenta de que si no hacía esto, nadie más lo haría. Así que aprendí a hacer de tripas corazón. Y resulta que lo que me cohibía tanto antes, ser gay, ha sido mi mayor activo. Eso y mi increíble red de apoyo".

    Los amigos que Aker hizo en la comunidad LGBTQ lo ayudaron a sentirse cómodo en su forma de actuar y hablar. Y cree que es una persona mucho mejor por eso. "Ser gay me ha ayudado a superar tantos obstáculos que creo que no lo habría hecho, porque me ha permitido tener mucha empatía y una mente abierta", dice. "Así que mi consejo para otros como yo es que se sientan cómodos con quienes son, porque definitivamente va a ser su activo más fuerte".

     

    En busca de tu Isabel

    La relación de Aker con Chase comenzó cuando Isabel Hegel, una asesora de negocios sénior del banco, compró sus productos en Instagram. Estaba tan impresionada con la calidad de los productos y su historia que se puso en contacto con él. Aker ha sido un cliente leal de Chase desde entonces.

    "El hecho de que se comunicara conmigo probablemente cambió toda la trayectoria de mi compañía", dice Aker. "Es como mi hada madrina. Tengo tantas brechas en mis conocimientos sobre cómo administrar un negocio y financiarlo. Isabel responde a cualquier pregunta que tengo en cualquier momento, incluso los fines de semana. Todas las personas con las que he hablado en Chase han sido increíbles. No siento que esté haciendo operaciones bancarias. Parece que estoy trabajando con personas que están interesadas en verme crecer. Espero que todos en mi situación encuentren a una Isabel, porque es tan importante".

    Además del apoyo en torno a su negocio que recibe de Chase, Aker también está muy agradecido por el apoyo que Chase le muestra a la comunidad LGBTQ. "Podrías contratar a mil miembros de la comunidad LGBTQ, pero si solo te dedicas a lanzarles a un trabajo y se les discrimina sin el apoyo de nadie, no va a marcar una diferencia", dice Aker. "Eso es lo que me encanta de Chase. No solo ponen énfasis en la contratación de personas de diversos orígenes. Les dan las herramientas que necesitan para sentirse cómodos en el lugar de trabajo. Eso es lo más importante de todo".

     

    Curar más que la piel

    Aker todavía trabaja a tiempo completo mientras pone en marcha su negocio, y reconoce que no podría hacerlo sin las dos personas más importantes del mundo: su madre y su padre. "No sé cómo lo habría conseguido si no fuera por estas dos personas. No habría podido mantener mi otro empleo", dice. "Me están ayudando a llenar los pedidos. Esperamos que pronto, a medida que crecemos, los tres no seamos quienes hacen todo el trabajo".

    Hoy, la mamá de Aker se siente bien. "Se siente como sí misma de nuevo. Creo que también aprendió a apreciar la vida mucho más", dice Aker. "Definitivamente, ese fue uno de esos momentos en los que te das cuenta de lo corta que es la vida. Una experiencia como esa realmente cambia tu perspectiva sobre la vida y lo que es y no es importante. Al final, definitivamente nos ha acercado a todos, aceptando a los demás a un nivel mucho más profundo que nunca. Fue el catalizador de la marca y espero que ayude e inspire a muchos otros".

    Aker ya no se queda al margen de la vida. Y, gracias a pHix, tampoco lo hacen muchos otros.

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