Las tasas de interés no son el único costo asociado con un préstamo
¿En realidad, cuánto cuesta tu préstamo? Antes de pedir un préstamo, averigua cuál es el precio real.
Solicitar un préstamo es como planificar el viaje de tus sueños. Después de pasarte semanas investigando, encuentras boletos de avión a un precio que parece inmejorable, y más adelante te llevas la sorpresa de que te van a cobrar cargos adicionales por equipaje, selección de asientos y esos tentadores bocadillos durante el vuelo. De repente, el vuelo que parecía tan asequible se ha convertido en una pesadilla para tu presupuesto.
Antes de firmar el contrato para un préstamo, haz una pausa y piensa en lo que va a suponer a largo plazo obtener uno. Ya sea un préstamo para negocios o una nueva línea de crédito, cada producto financiero incluye unos gastos específicos que, si no se entienden por completo, a la larga pueden afectar significativamente tu bolsillo.
Primero, revisa los conceptos básicos de un préstamo
Antes de profundizar en los detalles de los cargos y los costos menos conocidos de un préstamo, revisemos los conceptos básicos de pedir uno. Cuando obtienes un préstamo, hay algunas piezas clave que están siempre presentes.
- Capital: la cantidad original que tomas prestada de un prestamista.
- Interés y tasa de interés: el costo del préstamo, calculado como un porcentaje de la cantidad del préstamo que se cobra cada año. Tu tasa de interés varía según las condiciones del mercado, la calidad crediticia del negocio y sus propietarios, y el tipo de préstamo.
- Tasa porcentual anual (APR): el costo total del préstamo, incluyendo el interés anual y cualquier cargo, aplicado como promedio a lo largo del plazo completo del préstamo.
- Plazo del préstamo: el tiempo que tomará devolver el préstamo si haces tan solo los pagos mensuales mínimos, también conocido como el período de pago.
- Cargos adicionales: varían mucho de un prestamista a otro. Comprender los cargos adicionales te ayudará a evaluar con precisión el costo total de tomar un préstamo.
- Depósito en garantía: hay algunos contratos de préstamo o prestamistas que requieren una cuenta de depósito en garantía (escrow) que usan para cobrar y reservar fondos para gastos, como impuestos sobre la propiedad y seguro. Tu prestamista podría requerir que hagas pagos para un depósito en garantía (escrow) como parte del pago mensual de tu préstamo.
Ten en cuenta que hay gastos adicionales
Lo que tiene el potencial de hacerle un daño real a tu bolsillo son los gastos adicionales menos conocidos. Aunque a primera vista puedan parecer insignificantes, estos cargos podrían acumularse y darte un susto. Para mantenerte un paso por delante y evitar sorpresas, estos son algunos de los costos importantes que a menudo se olvidan y que deberías tener en cuenta.
- Los cargos por iniciación y los costos de solicitud son gastos iniciales asociados a la obtención de un préstamo. Básicamente, estás pagando al prestamista por el tiempo y esfuerzo que han dedicado a revisar tu solicitud de préstamo, al igual que lo haría una aerolínea para cubrir los gastos asociados con el procesamiento de tu reservación por Internet. A menudo esto incluye cargos de evaluación de la solicitud del préstamo, que cubren el costo por evaluar tu calidad crediticia y el riesgo del préstamo y, por lo general, varían entre el 1% y el 5% de la cantidad del préstamo.
- Las penalizaciones por liquidar un préstamo con antelación son cargos inesperados que se imponen cuando decides pagar el total de tu préstamo antes del plazo acordado. Son cargos diseñados para compensar al prestamista por cualquier ingreso por intereses que pierdan en caso de hacer un pago anticipado. Casi siempre verás las penalizaciones por liquidar un préstamo con antelación en el contexto de una hipoteca, y podrían afectar significativamente tus planes financieros si piensas pagar el préstamo antes de lo programado.
- Los cargos y penalizaciones por pago atrasado se incurren cuando no puedes hacer el pago de tu préstamo en o antes de una fecha de vencimiento específica. Se aplican como consecuencia de un pago atrasado y se presentan de distintas maneras. Por lo general, son una cantidad fija, como de $25 a $50, o un porcentaje del pago atrasado. Si haces tus pagos a tiempo, podrás evitar estos cargos.
- Los cargos por fondos insuficientes se imponen cuando no tienes suficiente dinero en tu cuenta bancaria para cubrir el pago del préstamo. Estos cargos se aplican cuando el prestamista intenta retirar fondos, pero no puede hacerlo porque el saldo existente es menor que la cantidad del pago. Si tienes en todo momento la cantidad del pago mínimo en tu cuenta, podrás evitar incurrir en estos cargos y posibles cargos por sobregiro por parte de tu banco.
- Los cargos por referencia pueden aplicarse cuando se te deriva a otro prestamista o administrador de préstamos, que suele pasar cuando tu préstamo se transfiere a otra compañía. Estos cargos tienen como fin cubrir los costos asociados con este proceso de transferencia. Pueden ser una cantidad fija o un porcentaje de la cantidad del préstamo, que generalmente varía entre el 0.5% y el 1.0%.
- Los cargos por giro bancario se podrían incurrir cuando se transfiere dinero electrónicamente entre cuentas. Algunos bancos cobran una tasa fija por giro bancario, mientras que otros podrían imponer un cargo en forma de porcentaje. La media nacional de los cargos fijos por giro bancario está entre los $15 y los $30, mientras que los giros bancarios internacionales generalmente cuestan de $30 a $50.
Cómo resolver el dilema
Si tenemos en cuenta los cargos y las subidas de las tasas de interés, tal vez la idea de pedir un préstamo te resulte algo abrumador. Pero con las estrategias adecuadas, podrás tomar decisiones con confianza, adquiriendo la flexibilidad financiera que te aporta tener un préstamo a la vez que mantienes encarriladas las finanzas de tu negocio.
- Revisa cuidadosamente los términos del préstamo. Tómate el tiempo que necesites para leer y comprender los términos del préstamo, incluyendo la letra pequeña. Presta atención a cualquier cláusula o cargo que se te haya podido pasar por alto y que pueda repercutir sobre el costo total del préstamo.
- Compara las distintas APR. Cuando estudias las APR de varias opciones para un préstamo se comprende mejor el costo general y eso te ayudará a tomar decisiones informadas.
- Estudia el programa de pagos. Los plazos más largos de un préstamo pueden traducirse en pagos mensuales más bajos, pero también pueden llevar a costos generales más altos debido a intereses acumulados. Determina qué funciona mejor para tu presupuesto y tus objetivos financieros.
- Ten en cuenta los cargos. Más allá de la tasa de interés, identifica todos los demás cargos que podrían existir, desde los costos iniciales de solicitud hasta los cargos por referencia, que podrían surgir durante el plazo del préstamo. Mantener un fondo para imprevistos que te ayude a cubrir cualquier costo inesperado podría protegerte en caso de penalizaciones indeseadas.
El dinero y qué significa todo esto
Recuerda, la finalidad de obtener un préstamo es reforzar las finanzas de tu negocio. Pero antes de lanzarte a firmar nada, asegúrate de profundizar en los detalles de tu préstamo, desmenuzar su estructura de cargos y comprender cómo puede afectar tu capacidad de realizar los pagos. Una postura proactiva, informada y decisiva no solo acelerará el potencial de tu negocio, sino que también te posicionará de tal manera que podrás aprovechar cualquier oportunidad que surja más adelante.
Para aprender más sobre los costos de tomar un préstamo y de cómo el crédito puede ayudarte a desarrollar tu negocio, habla con un representante bancario de Chase en tu área.