Muchas víctimas de robo de identidad han sufrido el robo de su información vital en circunstancias ajenas a su control, como cuando se jaquea a una compañía con la que hacen negocios. Pero en un gran número de casos, los ladrones obtienen información de las víctimas como resultado del manejo descuidado de documentos financieros o tras dar información a un impostor sin darse cuenta.
Los siguientes consejos sobre qué hacer y qué no hacer te ayudarán a reducir las probabilidades de convertirte en víctima:
- En casa, protege tu información personal. No dejes información de cuentas financieras, números de Seguro Social o de licencia de conducir donde la puedan ver las personas que visiten tu hogar, como una persona que limpie tu casa o que pasee a tus perros.
- Ten cuidado también en la oficina. No es una buena idea dejar tus facturas o estados de cuenta personales en tu escritorio. Además, no descuides tu cartera o billetera: guárdalas bajo llave en un cajón. Quizás sientas que puedes confiar en tus compañeros de trabajo, pero ¿qué pasa con otros visitantes?
Ten cuidado con el buceo en la basura ("dumpster-diving")
Muchas identidades son robadas como resultado de los delincuentes que rebuscan entre la basura en viviendas o negocios. Los ladrones buscan cheques, estados de cuenta de tarjetas de crédito, estados de cuenta bancarios y de cooperativas de crédito, o cualquier cosa que contenga un número de cuenta o número de Seguro Social. Ten en cuenta que lo que desechas puede caer en las manos equivocadas.
- Una de las mejores maneras de protegerte es triturar los documentos financieros antes de desecharlos, especialmente los estados de cuenta de tarjetas de crédito, bancos y cooperativas de crédito, las ofertas de tarjetas de crédito "basura" y los cheques de conveniencia de adelantos de efectivo de tus tarjetas de crédito establecidas.
- Verifica la actividad de tu cuenta bancaria, de cooperativa de crédito y de tarjeta de crédito al menos mensualmente, o incluso con más frecuencia. Si puedes agregar una verificación rápida de tus cuentas cuando revisas tu email y redes sociales por las mañanas, podrás detectar transacciones sospechosas rápidamente y, con suerte, detenerlas antes de que las cosas empeoren.
Presta atención a las estafas de pretexto ("pretexting”)
Las estafas de pretexto ("pretexting”) se producen cuando un ladrón simula ser otra persona y te pide que reveles información personal, como tu número de cuenta, número de Seguro Social, etc. El estafador de pretexto ("pretexting”) puede simular hacer una encuesta, hacerse pasar por un empleado de una empresa con la que haces negocios o incluso anunciar que has ganado un concurso.
- Sospecha de llamadas telefónicas o emails pidiéndote que "verifiques" la información de tu cuenta, contraseñas o tu número de Seguro Social. No des números: si la llamada es legítima, la persona al otro lado no tendrá problemas para poner su solicitud por escrito.
- Recuerda que el IRS nunca te llamará para pedirte un pago ni te pediría tu información personal por teléfono.
Ten cuidado con la estafa de clonación de tarjeta ("skimming")
La estafa de clonación de tarjeta ("skimming") ocurre cuando le entregas tu tarjeta de crédito a un camarero o vendedor y éste usa un dispositivo portátil que registra la banda magnética. La banda contiene información que podría incluir tu nombre, dirección, límite de crédito y PIN, además del número de tarjeta de crédito en sí. Esta técnica es difícil de atrapar y es difícil de detener.
- Reduce la cantidad de artículos que llevas en tu bolso o billetera; muchos asaltos se hacen principalmente para robar tu identidad. No lleves todas tus tarjetas de crédito encima, solo una o dos. Y no guardes tu tarjeta del Seguro Social en tu billetera; ese es el artículo número uno que usan los ladrones para robar tu identidad.
- Además, ten cuidado cuando lleves otras tarjetas que incluyan tu número de Seguro Social. Es posible que las tarjetas de seguro médico, seguro odontológico y de identificación escolar usen tu número de Seguro Social. Considera dejarlos en casa si no es absolutamente necesario que los lleves contigo.
Cuídate de la observación directa (“shoulder surfing”)
Otra técnica común de robo de identidad es robar tu número de PIN o número de cuenta al observarte marcarlo en un teléfono o cajero automático (ATM), o escucharte que lo das por teléfono. Mira a tu alrededor cuando des información confidencial y mantén tu voz baja.
- Cuando pagues facturas, no las dejes en un buzón sin llave. Los ladrones a menudo conducen por vecindarios suburbanos después de que todos se hayan ido a trabajar. Toman el correo postal rápidamente de los buzones que tienen la señal roja levantada.
- Los ladrones de identidad también pueden regresar después de que se haya entregado el correo postal. Buscan estados de cuenta de tarjetas de crédito, bancos y cooperativas de crédito que puedan usarse para robar tu identidad. Considera obtener un buzón con llave (si es posible) o un apartado postal.
- Según la Comisión Federal de Comercio, una de las mejores maneras de detectar el robo de identidad es verificar tu informe de crédito regularmente. Pide tu informe de crédito gratis cada año para asegurarte de que toda la información sea precisa y que no se hayan abierto cuentas nuevas sin tu conocimiento. Solicita tus informes de crédito en www.annualcreditreport.com (Se abre en superposición) o llamando al 877-322-8228.
No hay manera de garantizar que nunca serás víctima de robo de identidad. Pero seguir cada uno de estos consejos puede ayudar a mantener tu información fuera de las manos de un delincuente.